Castel del Monte: la joya arquitectónica de Italia

Castel del Monte es verdaderamente un grandioso monumento histórico, ubicado en la región de Apulia. La combinación de elementos islámicos y góticos hace que el edificio medieval sea colosal y sorprendente. Ha sido incluido en la lista de objetivos de la UNESCO y es visitado anualmente por miles de turistas.

Un maravilloso ejemplo de fortaleza medieval, Castel del Monte es uno de los edificios más impresionantes de Italia. Se encuentra situado en lo alto de una colina de 540 metros de altura, cuyo nombre lleva la insignia del propio castillo.

Construido por el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Federico II, fue utilizado como villa de vacaciones por la familia imperial, pero su posición extraordinaria requirió operaciones de modernización.

Posteriormente, el castillo fue, a su vez, prisión y hospital. Hoy podemos disfrutar de la belleza de este atractivo medieval gracias al esfuerzo del emperador, que demostró una visión futurista y un conocimiento fantástico de la astronomía, las matemáticas y la filosofía medievales.

La arquitectura de Castel del Monte, un prisma octogonal, ofrece 8 torres dispuestas en 8 esquinas, con un papel defensivo. En el momento de su construcción, las paredes estaban cubiertas de mármol y el suelo estaba bellamente decorado con mosaicos.

Los muros, en algunos lugares superiores a los 20 metros, componen el edificio con un diámetro superior a los 50 metros. La gran cantidad de baños en el interior se debe a influencias árabes, y la apariencia general del edificio nos recuerda los fabulosos palacios de los cuentos de hadas orientales y los mitos sobre los antiguos caballeros y sus princesas.

La estructura tiene dos pisos, cada uno con ocho habitaciones interconectadas. Desde las torres se puede pisar la azotea, pavimentada con losas de piedra dispuestas en piqueta. Las vistas panorámicas que se pueden obtener desde estas terrazas fueron una gran ventaja estratégica en la Edad Media, proporcionando detalles sobre el enemigo a muchos kilómetros de distancia.

En aquellos días, todas las habitaciones estaban decoradas con mármol, mosaicos, pinturas y tapices multicolores, pero luego el Castel del Monte fue vandalizado y los tesoros en su interior fueron robados. Muchas de las puertas de acceso todavía están decoradas con mármol, pero no queda nada de la hermosa decoración que deleitó los ojos de Federico II.

Hoy, Castel del Monte se considera un símbolo de la mezcla de influencias y religiones, un patrimonio cultural único en un paisaje impresionante, en uno de los destinos turísticos más famosos del mundo, Italia.

Sin duda, un atractivo turístico que, por su importancia histórica, cultural y arquitectónica, deberías incluir en tu itinerario al visitar el “País de la bota”.

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